Washington, 9 sep (Prensa latina) El expresidente Donald Trump enfrenta retos en Estados Unidos para mantenerse a la vista de la opinión publica aunque pocos discuten es la figura central del Partido Republicano, según publicó hoy el diario The Hill.
Niall Stanage, en su columna The Memo, aseguró que Trump trata de mantener su relevancia política y podría ser una dura batalla, pese a que nadie discute es la figura central del Partido Republicano.
Afirmó que tras varios meses de gobierno de Joe Biden, al exmandatario se le hace difícil llamar la atención y si quiere retornar a la Casa Blanca tendrá que ser central en el panorama político hasta 2024, mientras no ocupe ningún cargo.
No obstante, opinó Stanage, no muestra signos de desvanecerse y viaja por el país promoviéndose en reuniones partidistas como las que celebrará en Perry, Georgia, el 25 de septiembre, y en Des Moines, Iowa, el 9 de octubre.
Trump mantiene una dieta constante de entrevistas con medios de comunicación amigos, y emite un flujo persistente de declaraciones por correo electrónico, varias de las cuales atacaron a Biden en términos vívidos por la caótica retirada de Estados Unidos de Afganistán.
No obstante esos correos electrónicos no tienen el alcance ni la velocidad de sus antiguos tuits. Eso es un problema importante para el hombre que a veces fue llamado el primer presidente de Twitter, apuntó el periodista.
El peso de la expulsión de exmandatario de Twitter, Facebook y YouTube tras fomentar los disturbios del 6 de enero, se hará sentir, indicó el analista.
Sin embargo, el expresidente trata de mantenerse en la escena aunque algunos critican su probable aparición como comentarista el sábado por la noche, en la pelea de regreso del envejecido boxeador Evander Holyfield.
Eso no coincide con las expectativas de mucha gente sobre lo que debería hacer un expresidente en el 20º aniversario de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 200, opinó Stanage.
También es cuestionable, según sus críticos, sus declaraciones en contra de la retirada de una estatua de Robert E. Lee, el famoso comandante del ejército confederado durante la Guerra Civil, de Richmond, Virginia.
Trump elogió a Lee como un «genio» y lamentó: «Si sólo tuviéramos a Robert E. Lee para comandar nuestras tropas en Afganistán».
Esos elogios fueron para un militar que luchó por dividir al país y preservar la esclavitud, puntualizó el periodista.
Según Dan Judy, un estratega del ala tradicional republicana, el estatus de Trump se erosiona simplemente porque ya no es presidente y existe una gran cantidad de eventos importantes en curso en los que él no es realmente un jugador.
Aun así, Trump tiene puntos fuertes que no se pueden descartar: la feroz lealtad de su base, la capacidad de atraer a grandes multitudes, que volverá a exhibir en sus próximos mítines, y un enorme cofre de guerra de 102 millones de dólares para gastos políticos a finales de junio.